Sonaban los acordes de la canción “Make it happen (Haz que ocurra)” cuando Mariah Carey se desplomó hacia el suelo. Nada grave, sólo una torcedura de tobillo. Ocurrió durante un concierto en Singapur hace unos días.
Pues bien, las imágenes de su llegada al aeropuerto de Los Ángeles han levantado una polvareda de preocupación, ya que en ellas se puede ver a la diva montada en una silla de ruedas. En la caída, Mariah se torció un tobillo, uno de los bailarines la recogió y ella siguió cantando. De ahí a verla en silla de ruedas… Se han disparado todas las alarmas.
“Mariah se torció el tobillo en Singapur”, explicaba su representante y subrayaba que “debería haber llevado unos zapatos más cómodos, pero no tiene ningunos”, es lo que tiene ser una diva, sólo se tienen zapatos de salón y de alfombra roja. “Voy a enviarle hoy un par de zapatos planos”, señaló la portavoz.
Aún insistía en Twitter con el siguiente mensaje: “Sí, Mariah Carey está bien. Una pequeña caída no la detuvo ni a ella ni a su concierto. Es una verdadera campeona”.
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